Tal hazaña sólo pudo haber ocurrido en un país donde los sucesos extraños están a la vuelta de la esquina…¡China!
Un hombre derribó el sólo a una enorme excavadora utilizando solamente fuegos artificiales como arma de ataque, el operador pretendía usar la gigantesca máquina para derribar el edificio, pero no contaba con que un hombre lo esperaba en la azotea con una gran dotación de fuegos artificiales.
Tras el intento de demolición el operador de la máquina fue ahuyentado con la pirotecnia, obligándolo a hacer una inmediata retirada del lugar.
Lo que nadie esperaba es que en su desesperación, el operador, manejara rápidamente sobre las llanuras uniformes del terreno provocando una inminente volcadura de la enorme excavadora.